¿Alguna vez viste la película Cartas a Julieta? Si tu respuesta es sí, seguramente recuerdas al club de las secretarias de Julieta, mujeres voluntarias que se encargaban de responder todas las cartas que llegaban a la casa de Julieta, en Verona.
Si eres fan de esta historia, hoy quiero contarte que, afortunadamente el Club di Giulietta sí existe. Todo comenzó gracias a Ettore Solimani, guardián de la tumba de Julieta, quien en 1930 comenzó a recopilar las cartas que llegaban al recinto, escritas por los turistas que visitaban la ciudad del amor. Es así como Solimani, motivado por todas las historias que encontró, decidió comenzar a darles una respuesta.
Siguiendo con la noble tradición, actualmente los voluntarios leen las cartas enviadas de todas partes del mundo, recibiendo de 8,000 a 10,000 mensajes al año. Estos se clasifican por idiomas y son respondidos según las capacidades del equipo, compuesto por personas de diferentes nacionalidades. Cada carta se lee, traduce, responde y se almacena en el archivo del Club di Giulietta que contiene miles de historias.
Como imaginarás, las cartas que llegan a casa de Julieta buscan contar una historia romántica, narrar las desventuras de un corazón roto o simplemente pedir a la joven Capuleto algún consejo para encontrar el amor. Por eso, el objetivo del Club di Giulietta es intentar responder con las palabras adecuadas, dando un mensaje de esperanza a todo aquel que busca refugio en Julieta.
¿Te gustaría participar en esta dinámica? ¡No hay pretextos! Afortunadamente, no es necesario viajar a Verona para poder contar tu historia, ya que el club ofrece diferentes alternativas, como contactarlos via mail (dearjuliet@julietclub.com) o por correo, a la siguiente dirección: Vicolo Santa Cecilia 9, 37121 Verona. Si te encuentras en Italia, también puedes ser una secretaria de Julieta y ayudar al Club di Giulietta, equipo con una tarea noble: conservar el amor y la esperanza.